El crimen de Rosa Elvira Cely conmovió a la sociedad Colombiana ( Lea aquí), con la gestión de la Fundación Ni con el pétalo de una rosa se logró comisionar esta escultura en su memoria que será instalada en el sitio del crímen, como símbolo de el rechazo a la violencia de género.
Justificación del proyecto.
Esencialmente el proyecto busca crear un sitio que sea un homenaje a la mujer, a la feminidad, y desde ahí por contraposición, obviamente un monumento al rechazo total a la violenc ia contra ella.
Hablando de la forma, en la obra busco evidenciar un equilibrio particular que personalmente siento en la mujer:
La redondez de la obra simboliza la grandeza de la feminidad, todo lo que implica ser un ser preparado para traer vida… la maternidad, la intuición, la generosidad.
La geometría de la obra simboliza la practicidad de la mujer, la organización.
La rotura simboliza la violencia a la que fue sometida Rosa y tanta otras mujeres… es la piedra perfecta, suave, limpia rota con violencia. Por eso la escultura no solo simboliza a Rosa sino el crimen de la violencia de género.
Sin embargo no sólo planteo la escultura como un monumento a la mujer, sino que la obra es planteada como un lugar de reflexión. Una escultura que invita al observador a que interactué con ella ya que puede abordarla y sentarse en ella y el hecho de que este lugar esté cargado de un simbolismo y una historia tan poderosos, hará irremediablemente que el observador reflexione sobre este horrible suceso y sobre la violencia contra la mujer.
Por último, en los últimos 5 años he unido mis estudios en geobiología y radiestesia a mi trabajo artístico poniéndolos al servicio de la sanación de espacios y la reconexión del ser humano con el planeta. Este proyecto se plantea también desde una perspectiva de sanación de un espacio que ha sido afectado energéticamente por un crimen atroz y doloroso que sin duda ha generado un impacto en el lugar y en la sensación que se tiene al recorrerlo. La intervención del espacio se hará estudiando las condiciones físicas y energéticas de este, planteando una solución de restablecimiento energético ayudado por la escultura.
-Cual es la propuesta de sanación específica para este sitio?
Aunque para la mayoría de los lectores todos los términos y situaciones descritas para la sanación del lugar pueden resultar ajenos trataré de explicarlo comparándolo con situaciones cotidianas para hacerlo más entendible.
Primero, el material. El material utilizado para la obra será un bloque de piedra muñeca blanca de Sibaté. Esta piedra se cataloga como una arenisca cuarzosa pues su composición es de más del 90% de cuarzo blanco. El cuarzo es un mineral piezoeléctrico lo que significa que almacena y es conductor de energía, a lo largo de la historia y en culturas se ha utilizado el cuarzo en joyas, amuletos, en los relojes cuarzos y ahora también en la tecnología, como en los computadores, en los microchips, etc… lo que hace ideal este material para el proceso de “sanación energética” que se va a llevará cabo.
También es ideal para la intemperie pues la composición de la piedra es resistente a los agentes externos como el agua y la luz solar, no en vano ha sido históricamente usada en las fachadas de las construcciones en Bogotá.
Segundo, la intervención. La obra se instalará (dentro de lo posible) en el sitio en el que sucedió el crimen o lo más cercano posible al vórtice o sus emanaciones. En un sitio cercano (en un radio de 30mts.) se ubicará un vórtice “positivo” en donde se ubicará un “mandala” fabricado con las piedras que quedan de haber tallado la escultura del bloque, (un vórtice es un lugar un donde se generan emanaciones de energía electromagnética). Ahora, digamos que cuando una piedra se parte en dos, entre esos dos pedazos queda siempre la conexión energética latente, de esta manera al instalar la escultura en el sitio especifico del evento (que en este caso es como un polo negativo) y todos sus remanentes en un mandala geométrico donde está el vórtice con energía positiva, esta conexión latente entre los materiales se activa generando un flujo del lugar positivo al negativo por asi decirlo, de esta manera comienza el proceso de sanación. La escultura y el mandala se alinearán a su vez con los cerros de guadalupe y monserrate los cuales se sabe desde la época precolombina son poderosos lugares donde fluye la energía “femenina” y ” masculina” respectivamente, con esto el sitió se nutrirá y nutrirá de esa reconciliación y complementariedad a quien lo use como sitio de reflexión.
Tercero, la interacción. A medida que este flujo energético vaya sanando con el tiempo el lugar en donde murió Rosa Elvira, la escultura va a ser cada vez más atractiva para la gente que se acerque a ella, me refiero a que instintivamente la gente querrá acercarse a ella en vez de alejarse, y al sentarse sentirá ese flujo especial de energía desde el vórtice positivo, estos vórtices han sido tradicionalmente usados en todas las culturas para colocar sitios de rito, por ejemplo en la misma iglesia católica, en especial en los templos de los jesuitas, los pulpitos de las iglesias son y han sido estratégicamente construidos en vórtices positivos que ayudan al sacerdote a conectarse con la divinidad y hablar a sus feligreses desde ese estado espiritual. De esta manera la escultura se convertirá en un lugar de reflexión y de conexión con nuestra divinidad para todo el que decida abordarla.